Cómo ser un equidistante y que no te linchen en las redes
La polarización extrema de la conversación pública deja poco espacio para quienes no participan de guerras tribales en las redes sociales
A los equidistantes de este país les pasa como al coronel de la novela de García Márquez, que no tienen quien les escriba. Huérfanos de apoyos en la nueva plaza de la inquisición de las redes sociales, no encuentran acomodo en ninguna tribu que les permita saber qué causas tienen que defender y cuáles tienen que atacar. Y eso les coloca en una tierra de nadie situada a cinco minutos de los linchen los unos y los otros, siempre acusados de blandenguería y traición a la manada o, peor aún, de no tomar partido en esta guerra de las galaxias con caspa y serrín de la política ibérica.
Que te llamen equidistante es un insulto. Y no es fácil huir de él. Los equidistantes no saben disimular. Su condición les delata y les traiciona. Y llaman muy rápidamente la atención de dos de grupos de depredadores sociales que sólo coinciden en su inquina contra ellos: los cazadores de fachas y los detectores de progres. Por eso, si usted, lector, es uno de estos, hágame caso y abónese al arte del disimulo. Conjúrese consigo mismo, entrene sus silencios y cuente hasta diez o hasta veinte cada vez que publique un tuit o un post en el que exprese alguna idea política que vaya, como diría, a contracorriente. Vivirá mejor y esquivará sentirse como Morata después de una mala tarde con la Selección.
Por poner algunos ejemplos: no verbalice que rechaza los indultos, pero que espera por el bien de este país que la jugada catalana de la factoría Sánchez/Redondo se salde con éxito; no diga que el documento de España 2050 es excelente, aunque lo hayan vendido como pura propaganda; si hay un escrache, recuerde la regla de oro: si se lo hacen a uno de su cuerda, es una vergüenza; y si es a un adversario, es porque se lo merece. Y, por último, no se olvide de elegir una trinchera y de aplaudir mucho a los suyos en Twitter o en Facebook. Parecerá un borrego digital, pero al menos estará acompañado y sólo le insultarán los del bando rival y no los suyos.
Este artículo se ha publicado con anterioridad en 20 Minutos. Si quieres leer más artículos de actualidad política, este es el enlace. 👉 https://www.20minutos.es/autor/juan-carlos-blanco/