Que la realidad no te estropee una buena noticia
Unas frases sacadas de contexto de un jugador de la selección francesa de fútbol sirven para el ya clásico linchamiento en redes sociales
Qué buen ejemplo de cómo funciona la desinformación es éste de las declaraciones del centrocampista francés Adrien Rabiot donde supuestamente menospreciaba al futbolista Lamine Yamal.
Si veis el vídeo que os adjunto, veréis que el tono de sus declaraciones es muy respetuoso y hasta con un tinte de admiración.
Pero el titular sacado de contexto que salió en casi todos los medios y que luego fue diseminado y viralizado en redes sociales fue completamente distinto.
Parecía como si Rabiot hubiera echado espumarajos por la boca contra el adolescente Lamal y le hubiera faltado al respeto.
Y no.
¿Qué hemos visto entonces? Pues una prueba de que ese dicho periodístico que sostiene con cinismo que nunca debes dejar que la realidad te estropee una buena historia está más vivo que nunca en esta era de las redes sociales en las que nadie comprueba nada.