Usa las IA…pero no te olvides de usar tu cerebro
Como externalicemos nuestra capacidad de pensar, luego no nos quejemos que se nos está atrofiando el cerebro de tan poco que lo usamos.
Comparto por aquí una reflexión sobre el uso de la inteligencia artificial con la que estoy de acuerdo en todo lo esencial. Se titula ‘Sedentarismo intelectual e inteligencia artificial’ y la firma Antonio Ortiz en su newsletter Error500.
Como le pasa a Antonio, me considero también una persona curiosa y abierta a los cambios que se dedica explorar, sin ponerse apocalíptico, algunas de las oportunidades que nos ofrece la inteligencia artificial. Tampoco gran cosa, pero sí cada vez con mayor asiduidad.
Os cuento: uso poco ChatGPT, estoy descubriendo Perplexity para documentarme (lo siento, Google) y le pido ilustraciones al Copilot de Microsoft como si tuviera un ilustrador de guardia las 24 horas del día. Y, por cierto, algunas de estas aplicaciones de IA ya están en la pantalla principal de mi móvil.
Ahora bien, tampoco soy un entusiasta acrítico. Sí creo que, como sociedad, necesitamos debatir con profundidad y con algo de calma sobre algunas de las consecuencias del uso masivo de la IA, especial en dos vertientes:
1. La automatización del trabajo, con la inevitable destrucción de empleo para los seres humanos.
Y 2. Como advierte el propio Antonio Ortiz: la epidemia de sedentarismo intelectual.
Si externalizamos nuestra capacidad crítica y dejamos por tanto de entrenarla y estimularla, luego no nos podremos quejar de que ya no sabemos pensar como antes, con todo lo que eso significa.
Ya estamos advertidos con nuestra adicción a la deriva dopamínica. Estamos tan enganchados a las pantallas que leemos menos medios, vemos menos películas y series, escuchamos menos canciones largas y, por supuesto, leemos menos novelas y ensayos.
¿Queremos ir a peor por el abuso de las IA?
Bueno, de acuerdo, pero que sepamos que delegar nuestra capacidad de pensar en una IA tiene consecuencias para nuestra capacidad de concentración y de atención. No nos hace inevitablemente mejores, sino todo lo contrario. Así que hazte un favor: usa las IA, pero, sobretodo, usa tu cerebro, no vaya a ser que se seque. Lee libros, lee periódicos, ve al cine o al teatro, escucha una canción entera o lo que te apetezca, pero hazlo. Y hazlo ya 😉
Para mí lo más preocupante es lo fácil de usar que es. Ojalá fuera menos accesible. Que hubiera algún tipo de barrera (no necesariamente monetaria). Está tan a mano y es tan fácil de usar que lo difícil será no usarla. Requerirá un esfuerzo más que notable mantenerse "despierto".