Trump es el producto más depurado de las corrientes iliberales que han entendido que en comunicación política valen ya más las emociones que las razones.
Aunque lo haya negado, clava ese proyecto (para quien no lo conozca, es un proyecto de organizaciones ultraderechistas que trazaron un plan para hacerse con el poder y desestabilizar a las instituciones).
No, el apoyo de las tecnológicas no es extraño. En el mandato de Biden, pendía sobre ellas la amenaza de sanciones y restricciones a su poder, con comisiones en el Congreso y en el Senado que amenazaban con limitar su poder. Hoy, Trump, a cambio de recibir su apoyo, descarta las posibles sanciones y aboga por la desregulación de las tecnológicas y por aliarse con ellas a cambio de que éstas le apoyen en sus redes.
Y lo de los chinos, pues está más cerca de lo que pensamos. El orden mundial está cambiando. Y no tardaremos décadas en verlo, sino semanas o, a lo sumo, meses.
Es muy hábil en el manejo de la agenda pública. Lo de estos días de ir filtrando lo de Epstein en cómodas cuotas es el ejemplo más cabal de esa estrategia de gestión de la opinión pública
Es del proyecto 2025, verdad?
Aunque lo haya negado, clava ese proyecto (para quien no lo conozca, es un proyecto de organizaciones ultraderechistas que trazaron un plan para hacerse con el poder y desestabilizar a las instituciones).
Si, lo raro es que cuente con el apoyo de las tecnológicas.
Al final, los europeos acabaremos en alianza con los chinos.
No, el apoyo de las tecnológicas no es extraño. En el mandato de Biden, pendía sobre ellas la amenaza de sanciones y restricciones a su poder, con comisiones en el Congreso y en el Senado que amenazaban con limitar su poder. Hoy, Trump, a cambio de recibir su apoyo, descarta las posibles sanciones y aboga por la desregulación de las tecnológicas y por aliarse con ellas a cambio de que éstas le apoyen en sus redes.
Pues muchas gracias, Juan Carlos.
Más motivos para usarlas lo menos posible.
Y lo de los chinos, pues está más cerca de lo que pensamos. El orden mundial está cambiando. Y no tardaremos décadas en verlo, sino semanas o, a lo sumo, meses.
Es muy hábil en el manejo de la agenda pública. Lo de estos días de ir filtrando lo de Epstein en cómodas cuotas es el ejemplo más cabal de esa estrategia de gestión de la opinión pública